sábado, 2 de agosto de 2008

"El amor ausente"

Hace cuatro años, en una época complicada, efervescente y fascinante de mi vida, la señora Bloom me habló sobre un escritor español que aseguraba que todos somos naturalmente bisexuales; luego la sociedad, las experiencias y los gustos finalmente nos van inclinando hacia uno u otro de los géneros.

Curiosamente la señora Bloom me volvió a hablar de este escritor, porque había leído en un diario que murió justo ayer a los 46 años de una neumonía. Se llama (¿se llamaba?) Leopoldo Alas. Leí esa nota del diario y, ya teniendo su nombre, quise saber más sobre él y sus libros. Encontré algunos de sus textos en Internet y me sorprendí gratamente.

Por eso mismo me gustaría compartir con ustedes especialmente un texto suyo que leí, "El amor ausente", que pertenece a su libro de ensayos "Los amores periféricos". Me encantó, es una reflexión muy profunda y aguda sobre temas universales como los amores imposibles, la felicidad, la insatisfacción, la creación. Su lectura es muy amena, incluso citando a algunos filósofos.

El texto tiene 23 páginas y vale la pena ser leído con calma. A mí me iluminó especialmente a partir de la página 86 del libro (que es la número 18 del documento linkeado), hasta el final. Pero igual recomiendo leerlo todo. Me hizo repensar muchas cosas que andaban dando vueltas en mi cabeza y que ahora se organizan mejor.

Espero que alguno de ustedes también pueda leer el texto, así podemos comentarlo: aquí en el blog, por mail, por teléfono o cara a cara. Creo que nos enriquecerá.


(el texto aquí)

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Mon Chou,
Muy bueno el fragmento de Alas... creo que me sentí identificada de alguna manera...habría que preguntarnos por qué hay tantas maneras de evadirse de la realidad?
En lo personal creo que aceptarla es el primer paso para poder modificarla,pero ya lo hablaremos personalmente.

Grosses bisous

Loulou

Maestruli dijo...

Hola Loulou! La primera y única hasta ahora a animársele a este texto de Alas. Hay que aceptar la realidad para ser felices, ese pareciera el mensaje, a cambio de conformarse con esa realidad y no pretender nada extraordinario. Cuál será la mejor elección?

Anónimo dijo...

Pero la realidad también se construye, Maestru: desde el punto de vista del sentido, es un efecto, no una causa (por eso hay tantas realidades como personas y, claro, como enamorados y/o amantes). Por otro lado: ay, qué texto tan oportuno. ¡Beso!

Anónimo dijo...

Yo de nuevo. Para mí, quien mejor discurre sobre el amor y sus afecciones sigue siendo Roland Barthes en sus Fragmentos de un discurso amoroso. Dejo un link con algunos pasajes:
http://www.enfocarte.com/7.32/barthes.html
Otro besito.

Maestruli dijo...

Querida Crimson,

muchísimas gracias por citar a Barthes. Me hacés descubrir un universo que no conocía. A ver si sacamos algo en limpio con estos ensayos...

Anónimo dijo...

Muy bueno lo de Barthes, ya lo leeré. Sin embargo quiero cree que todas las realidades, como las religiones, tienen que tener un común denominador debajo de todo no?? quizás eso es lo que tendríamos que aceptar...

Besos grandes

Loulou

Beya dijo...

Voy a tener que leer el artículo sí o sí.

Maestruli dijo...

Ay Loulou, es que justamente las religiones son el sumum del idealismo. Creer en un ser superior que sabe todo lo que hacemos, que eventualmente juzga nuestros actos, que luego de la muerte nos resucitará, eso es el colmo del idealismo.

Maestruli dijo...

Beya, ¿a qué artículo te referís? ¿Al de Alas o al de Barthes? Creo que vale más la pena el de Barthes que cita Crimson, flasheé también y me quiero comprar ese libro ya mismo "Fragmentos de un discurso amoroso".

¡Cuánto que tengo para hablar en mi próxima sesión de terapia!

Anónimo dijo...

Bueno chouchou... me descubriste... pero creo que el idealismo no es el sumum de la religión, sino la intención de resolver el famoso caos al que temían los griegos, la religión sería entonces la búsqueda de sentido en persona... pero ya me fui de tema. Concuerdo con Crimson que el texto de Barthes es muy iluminador... so to speak.

Orla Publicidad dijo...

Te cuento maestruli que me encantó el ensayo y me hizo reflexionar muchísimo, y estuve torturando a mis amigos para que lo leyeran y me dijeran qué opinan. Me gustó mucho pero no sé por qué me dejó medio perpleja y pensativa y hasta un poquito depre durante toda una semana...

Maestruli dijo...

Epa Claudia! Mirá vos los efectos que tiene la literatura! Sí, a mí también me dejó pensativo ese texto y el de Barthes que citó Crimson. Pero no depre por suerte...

El amor... qué tema!